lunes, 29 de agosto de 2022

El contador inteligente de la luz

Contador analógico

Los que tenemos ya una edad recordamos aquellos contadores de luz que estaban instalados en el interior de la vivienda que mediante una ruedecilla en movimiento se veía si había consumo o no, o si se consumía poco o mucho (en base a la velocidad de la ruedecilla) al mismo tiempo que registraba el consumo fácilmente legible. Un empleado de la compañia llegaba, leía y apuntaba. Claro que entonces no ocurrían estas rareza de ahora, como la subasta del "pool".

Con los años, estos aparatos se modernizaron y pasaron a ser inteligentes. Así como a ubicarlos en un cuarto comunitario cuyo acceso requiere de una llave que custodia el conserje y, supongo, la compañía distribuidora-comercializadora.

Estos contadores inteligentes hacen muchas cosas, gracias al ´software´ que incorporan. Así, la tecnología de telegestión permite un control absoluto sobre la energía suministrada aportando más información para una mejor monitorización del consumo.

Contador inteligente
A mi me parece muy bien, todo lo que sea progreso y mejora, pero lo que no acabo de entender porque esta gestión es realizada por la misma compañía suministradora. No lo entiendo. ¿No sería más lógico que lo gestionara un organismo independiente y público de forma que a las empresas distribuidoras y comercializadoras se les facilitasen los datos de consumo y otros necesarios? o ¿Por qué no se instalaron en el interior de los domicilios?

En fin, es una reflexión que me hago en aras a la trasparencia y buen gobierno. Y es que como saben, todos somos muy buenos y honestos, hasta que dejamos de serlo.

Y es que hemos visto ya en estos últimos meses como el coste de la energía ha experimentado grandes incrementos y las compañías y empresas grandes beneficios. Y tampoco sabemos, o yo no entiendo, el porqué del encarecimiento tan desproporcionado, al menos en España, donde contamos con energía de origen renovable, ya sea hidráulica, eólica o solar, y poca energía relacionada con el consumo de gas ya sea en centrales de ciclo combinado o cogeneración.

Distribución del origen de la energía en España

En un recibo doméstico también podemos observar el desglose de este mix energético, donde se aprecia que la energía generada por el gas, causa de todos los males, es minoritaria en España. Y es que el encarecimiento del gas, principalmente provocado por la inexplicable invasión de Ucrania que ha enfrentado a occidente con Rusia, está siendo un motivo de enriquecimiento desaforado para algunos paises que están "haciendo el agosto", nunca mejor dicho, con su venta y exportación alternativa del combustible. Lo que a su vez influye en los precios de otras necesidades básicas, pero los de siempre pretenden evitar se traslade a los salarios. En fin, lo de toda la vida.

Distribución del origen de la energía doméstica de una importante compañía 


 

 

sábado, 27 de agosto de 2022

¡Es vergonzoso!

Ayer leí una noticia en Bolsamanía: “Los británicos pagarán un 80% más por la luz y el gas a partir de octubre”.

Absolutamente demencial. Si la salida de Boris Johnson en Reino Unido podría haber sido una buena noticia por su alocada gobernanza y por la influencia que este país tiene en el mundo, me da la sensación de que no va a ser así.

Llevamos ya más de un año con el encarecimiento imparable de la energía en Europa. Ello a su vez ha hecho dispararse los precios de la alimentación y de la vivienda, dos necesidades más que básicas. Los gobiernos tratan, o aparentan, de tomar medidas para paliar el suceso pero ni con esas. Cualquier intento es criticado y penalizado.

Hace 40 años que el mundo occidental no conocía un incremento de los precios de tal magnitud, además con la contención de salarios que en España lleva ya más de veinte años la situación se está haciendo insostenible.

Una de los factores, no el único ni el principal, que ha desencadenado esta reacción ha sido la invasión de Ucrania por Rusia. Algo que si se hubiera tenido un poco de sensibilidad no hubiera ocurrido. Pero vivimos actualmente en un extraño mundo de intereses y objetivos poco claros. Con unos líderes políticos de lo peor que ha habido desde hace más de medio siglo. Y desgraciadamente no se atisba en el horizonte más inmediato que esto pueda cambiar.

El otro día el presidente francés E. Macron anunciaba “el fin de la abundancia económica”. ¿Se puede ser más necio?...

No, no hemos vivido ninguna época de abundancia. Hemos vivido como siempre, al son de los mercados “esos señores con tanto poder”, que unas veces nos sacan el dinero obtenido con el trabajo de una manera y otras veces de otra. Su codicia es infinita. Mientras, estos políticos mediocres, interesados y egoístas, se pegan la vida padre sirviendo a los intereses de esa élite, cuyas fortunas no se gastarían ni en mil años que viviesen.

Así estas noticias leídas hoy alejan cualquier duda al respecto:

Tras un ejercicio (2021) bastante bueno, unos resultados del 1º semestre (2022) también buenos, las perspectivas de beneficios siguen siendo buenas. Los beneficios empresariales no sufren ni inflación, ni los aumentos de tipos ni nada. Otra cosa es que se pretenda actualizar los salarios, entonces: “El alza de los salarios puede acelerar la inflación y reducir la competitividad de las empresas españolas” y no digamos ya si el objetivo es incrementar el salario mínimo (SMI). Ya en 2021 el gobernador del Banco de España, que cobra 16 mil euros al mes,  previene “contra subir ahora el salario mínimo del 2021, mientras ve “inevitable” que la banca sufra nuevas reducciones de empleo”.

En fin, con estos caraduras al mando del barco, no podemos esperar nada bueno.

Y si esto nos está ocurriendo con un llamado gobierno progresista, no quiero ni pensar que ocurriría con un gobierno no progresista ¡Ni pensarlo!

Lá última que se han "sacado de la manga" es comparar las pensiones con el salario más frecuente para así tratar de justificar una reducción de las mismas. Como si las pensiones contributivas fueran una dádiva del gobierno de turno y no la consecuencia del trabajo de muchos años y sus correspondientes cotizaciones.

 

 


miércoles, 24 de agosto de 2022

¿Combatir contra la inflación?

Desde hace unos meses el desaforado incremento de los precios ha alarmado a los bancos centrales como si de algo inesperado se tratase.

Evolución del IPC

Más allá del encarecimiento de la energía derivada de la crisis entre Rusia y Ucrania, que sin duda ha servido de catalizador de esta reacción, para mí el verdadero motivo de la misma ha sido la ingente cantidad de dinero puesta en circulación por los bancos centrales a raíz de la crisis financiera de 2008. Una estrategia de política monetaria camuflada con el nombre de “Quantitative Easing” (QE) o flexibilización cuantitativa utilizada por los bancos comprando valores para reducir las tasas de interés, aumentar la oferta de dinero e impulsar los préstamos a consumidores y empresas. Estimulando así la actividad económica y manteniendo el flujo de crédito.

Evolución del tipo de interés

Ahora se pretende, a la inversa, reducir la inflación encareciendo los tipos de interés para así encarecer los préstamos y restringir la demanda.

Si el verdadero problema es o ha sido la puesta en circulación de muchos billetes sin regulación ni reserva alguna, el hecho ahora de pretender que ese exceso de dinero adquiera valor solo por el incremento de los tipos de interés es otra entelequia.

Actualmente hay dos factores que desaconsejan subir los tipos:

1.- La ingente deuda pública de los estados que verá encarecida su adquisición y reposición, actuando directamente contra el déficit público, salvo que los recortes del gasto público que deberían de ser brutales compensen esta nueva situación.

Evolución deuda pública

2.- Las hipotecas. Si tras la crisis de 2008, propiciada principalmente por la facilidad de obtener hipotecas por encima del valor razonable, con criterios laxos de solvencia, tipos de interés aceptables y plazos de amortización elevados, que así permitían acceder a la compra de una vivienda que había visto multiplicados sus precios por tres o por cuatro, en pocos años (2000-2007), ahora se pretende retomar al alza los tipos, por lo que muchos hipotecados verán seriamente mermada su capacidad de pago y las nuevas hipotecas se encarecerán de tal manera que harán aun más difícil la adquisición de una vivienda.

Evolución precio de la vivienda

A todo esto hay que añadir que ese encarecimiento de los precios deberán de soportarlo los ciudadanos, ya que como es habitual los salarios no van ligados al incremento de IPC y por tanto se merma el poder adquisitivo de los mismos.

¿La solución?...muy difícil. Solo un pinchazo de esta nueva burbuja inmobiliaria, que no afectaría a los propietarios de primera y segunda vivienda para su uso, solo a efectos patrimoniales y no a todos, y sí a aquellos que han utilizado la inversión en vivienda como un medio de enriquecimiento rápido y rentable. 

El capitalismo salvaje o neoliberalismo surgido a raíz de 1990 con el derrumbe de la Unión Soviética, no tiene entre sus prioridades disminuir la tasa de enriquecimiento, muy al contrario, la tiene de aumentarlo. Esto lo hemos podido ver tras la pandemia, aun no finalizada, donde muchas grandes compañías han visto mermados sus resultados, de forma que a la primera ocasión favorable han incrementado notablemente sus precios para resarcir sus anteriores malos ejercicios y poner también en valor el dinero, ya depreciado anteriormente.

Y este es el verdadero problema: la codicia humana ni tiene límites ni los pretende tener.

 

martes, 16 de agosto de 2022

El CIS, Tezanos y sus encuestas: Barómetro de julio


La ultima encuesta del CIS, el barómetro de julio-2022, nos deja los siguientes resultados, tras una encuesta a 3.988 individuos con una edad media de 52 años; 48,3% de hombres y 51,7% de mujeres y un 96,3% con nacionalidad española.

De los cuales califican su situación económica actual de muy buena el 4% o solo buena el 59,8%. En cambio la califican de mala el 19,4% y de muy mala el 6,6%.

Los principales problemas actuales que ven son: la crisis económica, el paro y la política en general.

José Felix Tezanos, presidente del CIS

El 22,1% prefieren a Pedro Sánchez de presidente y un 20,8% a Alberto Nuñez Feijóo. Pero en cambio un 25,1% de los encuestados valora muy mal a Pedro Sánchez y solo un 3,5% lo valora muy bien. Mientras a Nuñez Feijóo lo valoran muy mal el 12% y muy bien el 3,6%.

Por el contrario, votarían a PP el 24,9% y al PSOE el 21,1%.

De los encuestados un 38% se sitúan a la izquierda del centro y un 30,2% a la derecha del centro. Situándose un 24,2% en el centro político. (ver gráfico)

En cuanto a la inspiración de confianza, Pedro Sánchez solo inspira mucha o bastante confianza al 28,7% y Alberto Nuñez Feijóo al 35,6%.

Por otra parte el 83,2% de los encuestados votaron en las últimas elecciones de los cuales un 30,9% lo hizo al PSOE y un 17,9% al PP.

Solo un 2,4% de los encuestados se declara comunista, siendo la ideología liberal la de mayor porcentaje, un 13,4%.

El 98,6% declara haber ido a la escuela  y el 42,8% dice tener estudios universitarios.

Un 56,1% manifiesta ser católico, practicante o no.

Actualmente trabajan el 54,6% y están jubilados el 23,8%.

En cuanto a la renta de los hogares un 38,2% declaran ingresar más de 2.700 € y un 56,7% menos de dicha cantidad. Calificándose de clase media-media un 48,7% de los encuestados.



Resumen: La mayoría de los españoles están contentos con su economía, están situados a la izquierda en el espectro político, les gusta más Pedro Sánchez que Alberto Nuñez Feijóo pero votarían más al PP que al PSOE, lo contrario de lo que hicieron en 2019. Hay un alto porcentaje con estudios universitarios y la religión católica es mayoritaria. Se autodefinen como clase media-media.


Evolución del Índice de Confianza del Consumidor

Todo ello mientras el índice de confianza del consumidor (ICC) que también elabora el CIS, ha caído notablemente en julio. Luego claro, en las elecciones nos pasa lo que nos pasa, nunca elegimos bien desde hace mucho tiempo. Muchas contradicciones.

 

domingo, 14 de agosto de 2022

Feijóo, el preparado

Tras la crisis del Partido Popular  que acabó con la carrera política de Pablo Casado y su escudero Teodoro García Ejea, todas las miradas se dirigieron a Alberto Núñez Feijóo (1968), que fue elegido nuevo presidente tras conseguir 2.619 apoyos de los 2.670 compromisarios que votaron en el Congreso Nacional celebrado en Sevilla el pasado día 2 de abril. Una mayoría aplastante, propia de partidos con escaso o nulo debate interno y con una militancia un tanto aborregada. Es lo que hay. Lástima que no se postulara también Isabel Díaz Ayuso como alternativa, para mí una política sincera, espontánea y luchadora. Pero no fue así y su tiempo ha pasado.

Alberto Núñez Feijóo, es licenciado en Derecho y funcionario de Administración Local. Su carrera política desarrollada en Galicia le ha llevado primero como jefe de gabinete y después como consejero, hasta la vicepresidencia y posteriormente hasta la presidencia de la Junta de Galicia, cargo este que ha desempeñado durante 13 años. Su salto a la política nacional era muy esperado dentro de las filas populares, aun a pesar de no haberse presentado en 2018.

Evolución de la deuda pública con Zapatero y Rajoy
En estos pocos meses que lleva como líder de la oposición no se ha notado ningún cambio en la habitual ya línea de trabajo de sus antecesores. La crítica permanente, la demagógica propuesta de bajada de impuestos en plena crisis y la falta de un verdadero y explícito programa de gobierno, me hacen pensar que estamos ante un nuevo M. Rajoy que tras hacer lo mismo, cuando alcanzó el gobierno; subió los impuestos, congeló salarios públicos y pensiones, el paro llegó a cotas históricas, se fundió el fondo de pensiones (más de 60 mil millones) y elevó la deuda pública (+ 422 mil millones) a máximos históricos de entonces. En definitiva, nada nuevo ni eficaz, un simple quítate tú que me pongo yo. Eso sí, echando la culpa de todo a Zapatero.

Ahora, con el nuevo candidato, todo será algo parecido. Aunque no lo diga ahora, Feijóo

Las mentiras de Rajoy

subirá impuestos, recortará salarios públicos y pensiones, la inflación y el desempleo bajarán o subirán en función de la coyuntura internacional, mientras que los verdaderos pagadores de la crisis seremos otra vez los trabajadores y asimilados.

En definitiva, una política encaminada a favorecer a los de siempre, repartiendo el esfuerzo entre todos y haciendo cada vez más pobre a la ciudadanía.

Hoy las encuestas le dan como ganador, yo espero que los votos no. Un gobierno de mayoría absoluta del PP nos llevaría a un retroceso significativo. Solo ver su "nuevo organigrama" de dirección ya me produce  rechazo. Más de lo mismo.

Dirección actual del Partido Popular

Lo que España necesita ahora no son profesionales de la política como la actual dirección del PP, sino líderes sociales con una buena trayectoria académica, profesional y laboral, que hagan de la gestión del día a día su objetivo de gobierno, que acaben con los chiringuitos, las subvenciones, las ayudas a fondo perdido, la inmigración ilegal. Que establezcan metas y objetivos tangibles, que reduzcan el déficit y la deuda pública, que diseñen y propicien una política laboral moderna con retribuciones salariales acordes al coste de la vida, que acaben con la especulación de la vivienda, bien de primera necesidad, y que fijen o comprometan su cargo al logro obtenido, sin disculpas o excusas manidas.

Es lo que hay, a estos ya les conocemos. 

lunes, 8 de agosto de 2022

De crisis en crisis

Nancy Pelosi a su llegada a Taiwan

A decir verdad, los últimos 15 años están siendo un poco movidos. No hemos salido de una y nos metemos en otra. Así de la crisis financiera de 2008, sin haber sido resuelta, pasamos a la crisis sanitaria de 2020 y de esta a la crisis de Ucrania en 2022. Ahora tenemos la amenaza de la crisis en Asia tras la inoportuna visita de Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de representantes de EE.UU, a Taiwan que ha desatado la ira de las autoridades chinas, que hoy por hoy son las que están reconocidas en la mayoría de países y organismos internacionales, mientras Taiwan mantiene un perfil bajo oficialmente.

Parece ser que la visita se realizó en contra de la opinión del presidente, Joe Biden, así como de voces autorizadas del ejército. No me extraña. Pero tampoco descarto que todo sea un paripé. Como ya hemos visto en Ucrania, la directriz de EE.UU. es alentar el enfrentamiento “hasta el último ucraniano” como planteó recientemente V. Putin.

Con este foco de inestabilidad, incertidumbre y peligro de expansión a nivel mundial no se puede permitir que surja otro en el área Asia-Pacifíco. Por lo que la citada visita, además de inoportuna, tiene matices de provocación y objetivos un tanto alarmantes.

Joe Biden, presidente de EE.UU.

¿Por qué?...veamos.

Estados Unidos lleva más de 100 años manteniendo una hegemonía mundial en aspectos económicos y militares, con la influencia en materia social que ello conlleva. Algo que tras el derrumbe de la Unión Soviética y del "telón de acero" se hizo más manifiesto. Ahora, en los últimos 20 años, el despertar de China y su adopción del sistema capitalista desde el punto de vista económico, no desde el político, ha propiciado un crecimiento y una influencia a nivel mundial que EE.UU. considera una amenaza para sus intereses generales, tanto económicos, como geoestratégicos. Su defensa de la libertad y la democracia hace aguas cuando se trata de países ricos, dictatoriales y poco defensores de los DD.HH. como pasa con algunos de los estados árabes. Por el contrario, es muy beligerante si esos países adoptan, aparentemente, un régimen político del social-comunismo, como ocurre con estados del América central, Sudamérica y alguno de Asia. Una vara de medir que tiene un cariz muy subjetivo y condicionado.

Todo se ha acentuado tras la llegada de Joe Biden a la presidencia, un hombre mayor, que no parece estar al ciento por ciento de sus facultades y que da toda la impresión de que se comporta como una vulgar marioneta al servicio de extraños y ocultos intereses. Lo cual explica sobremanera la gran oposición mediática que tuvo el anterior presidente Donald Trump, que a la vista de los resultados de su periodo presidencial no fueron nada malos, ni en el orden económico ni en el político.

A mi no me cabe ninguna duda de que si hubiera salido reelegido hoy el mundo estaría más tranquilo.

viernes, 5 de agosto de 2022

¿El final de Twitter?

Página de inicio

En mi anterior artículo Elon Musk, ¿comprará Twitter?” quedaba a la espera de acontecimientos para despejar las dudas. En este tiempo se han producido diversos desencuentros entre el magnate y la compañía, de tal forma que está pendiente la demanda por incumplimiento contra Elon Musk en los tribunales de Delaware (EE.UU.) que parece ser se resolverá en el mes de octubre.

Los argumentos de Elon Musk para no cumplir su oferta se basan en la falta de transparencia de Twitter en cuanto al número de cuentas falsas y al número de ´bots´, si bien, a mi entender, este argumento no debería de ser muy convincente teniendo en cuenta que ya hizo una compra antes por el 9,1% de la compañía y presentó formalmente su OPA ante la S.E.C. (Comisión de Bolsa y Valores de EE.UU.), algo que en buena lógica supondría que ya debía de haber estudiado antes los pros y los contras de su inversión.

En mi experiencia como usuario de Twitter, hace unos años también de Facebook, si puedo decir que el declive de estas redes sociales, y otras, es palmario. Ya no es lo que era hace unos años. Sin descartar el cansancio de sus usuarios; las intromisiones de la compañía en los comentarios de los usuarios, marcando y alertando de aquellos que le parecen oportuno, las suspensiones de cuentas basadas en denuncias normalmente o en algoritmos de dudosa neutralidad, la pérdida de rentabilidad de la empresa que desde 2020 da pérdidas, la pesadez del sistema de anuncios publicitarios reiterativos en el “time line”, la falta de innovaciones de interés, etc. no hacen nada más que corroborar su declive y su pérdida de influencia en la formación de opiniones, algo que interesa mucho a los medios que replican sus noticias en la plataforma.

Twitter no debería nunca de haber subestimado a sus usuarios que son los que aportan valor a la red. Sin usuarios no es nada.

Seguiremos esperando al desenlace de este litigio pero convencidos de que ya solo será una etapa más para su desaparición.

Pagar 44 mil millones de dólares por una compañía en pérdidas, que debería de dar un beneficio mínimo de dos mil millones, es una absoluta locura. Ello no quita para que muy probablemente Elon Musk deba de indemnizar con una importante cantidad por su incumplimiento y una sanción administrativa por la potencial influencia en el valor diario de la cotización.

Seguimos a la espera. Pronto lo sabremos.