Podemos se descompone

A raíz de mayo de 2011, cuando surgió un movimiento espontáneo, juvenil, reivindicativo, contra la crisis y la corrupción política, que se repitió el año siguiente, apareció un partido político: “PODEMOS”, propiciado, muy probablemente, por la entonces vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, que a través de su gran influencia en los medios, alentó la presencia de un joven profesor universitario de ideología marxista, en los debates de La Sexta Noche. La estrategia era clara, restar al PSOE todos los votos posibles para unas próximas elecciones. Y así ocurrió. El nuevo líder socialista, Pedro Sánchez, obtuvo el menor número de votos en 2015 en la historia reciente del PSOE. Sus “flirteos” con Pablo Iglesias le pasaron una cara factura: tuvo que dimitir. Más tarde, apoyado por gran parte de la militancia volvió con fuerza y tras una moción de censura apoyada por PODEMOS y partidos nacionalistas, arrebató la presidencia a Mariano Rajoy.

Este gobierno débil, tras el rechazo a los presupuestos por los mismos que le auparon, tuvo que convocar elecciones a los pocos meses de iniciar su andadura. Hoy seguimos en una situación similar. No hay mayoría para conformar un gobierno estable.

PODEMOS está en descomposición tras la poco ejemplar conducta de su líder Pablo Iglesias, que antes criticaba a los que no vivían el día a día, a los que no hablaban con el panadero, el bodeguero o el quiosquero, porque vivían en chalets aislados de la realidad. Hasta que él se hizo Casta también. 

Su discurso duró poco. Muchos de los que con él empezaron, dimitieron. A otros los cesaron. Se convirtió en un líder de “mano dura”. Un dictadorzuelo en términos coloquiales. Tal que hoy su credibilidad es nula y lleva al partido a su desaparición.
Pedro Sánchez lo sabe y sea cual sea el resultado de las negociaciones, llevará a PODEMOS a su desaparición del espectro político. Si le apoyan, los engullirá. Si no le apoyan se "suicidarán". Pueden dar lugar a que en unas nuevas elecciones ganase la derecha: PP+C´s+Vox. 
Esta viñeta de Tomás Serrano para EL ESPAÑOL es muy ilustrativa, "alea jacta est":

RELACIÓN DE CESADOS/DIMITIDOS:

Monedero dimite de la dirección de Podemos tras criticar la estrategia 30-abril-2015

https://elpais.com/politica/2015/04/30/actualidad/1430410083_018713.html

Íñigo Errejón consuma la ruptura con Podemos y deja de ser diputado 21-enero-2019

https://www.elmundo.es/espana/2019/01/21/5c45c645fdddffeb258b460c.html

Luis Alegre, "fundador" de Podemos, deja a Pablo Iglesias y se alinea con Íñigo Errejón

18-enero-2017

https://www.elmundo.es/espana/2017/01/18/587e9b38268e3e835c8b45aa.html

Carolina Bescansa dimite de sus cargos en Podemos 2-febrero-2017

https://www.elmundo.es/espana/2017/02/01/58923474e5fdeab90c8b457d.html

Dimite Gemma Ubasart, líder de Podemos en Cataluña 10-0ctubre-2015

https://www.elmundo.es/cataluna/2015/10/10/5618d6afe2704e0a738b4598.html

Ramón Espinar deja sus cargos en Podemos y en la Asamblea de Madrid 25-ene-2019

https://www.lavanguardia.com/politica/20190125/454293982282/ramon-espinar-dimite-secretario-general-podemos-madrid-diputado-senado-pablo-iglesias-errejon.html

Nacho Álvarez dejan la dirección de Podemos (junto a Bescansa) 1-febrero-2017

https://www.eldiario.es/politica/Carolina-Bescansa-Nacho-Alvarez-Podemos_0_607890286.html

Tania Sánchez se incorpora a la candidatura de Íñigo Errejón en Más Madrid 1-marzo-2019

https://www.elindependiente.com/politica/2019/03/01/tania-sanchez-ira-la-lista-errejon/

Iglesias fulmina a su secretario de Organización, Sergio Pascual, para evitar una rebelión interna

https://elpais.com/politica/2016/03/15/actualidad/1458077759_050732.html 16-marzo-2016

Bustinduy rehúsa encabezar la lista de Podemos a Europa y deja la política 21-marzo-2019

https://www.lavanguardia.com/politica/20190321/461153436276/pablo-bustinduy-elecciones-europeas.html

¿Otra vez elecciones?

Si se confirma una nueva convocatoria de elecciones, resultará que desde junio de 2015 a diciembre de 2019 los españoles habremos sido convocados cuatro veces en poco más de cuatro años. Todo un récord.

La inmadurez de nuestro voto no augura un resultado muy diferente a las anteriores: un partido sin mayoría suficiente ni apoyos necesarios para comenzar una singladura segura por esas aguas turbulentas que hoy son las aguas internacionales de la política. “El nuevo desorden mundial” está ahí.

Un gobierno que se conformará en base a apoyos de partidos con muy diferentes intereses, que dejarán nuestro pabellón a merced de los huracanes y marejadas que se atisban por el horizonte. Ni a babor ni a estribor encontramos una confluencia estable, con la vista puesta en los intereses generales para tener solamente visiones partidistas y personales. Si malo fue el bipartidismo que trajo con el la corrupción, el nepotismo y la gran crisis, peor puede ser aún esa amalgama de partidos con objetivos manifiestamente encontrados.

Ahora bien, no busquemos a los culpables en los partidos, no. Somos nosotros, con nuestra corta visión y nuestro egoísmo los que propiciamos situaciones así.

Basta hacer un pequeño repaso al resultado de las elecciones municipales y autonómicas, también celebradas hace unos meses, para comprobar el mercadeo político que de las mismas se ha derivado. Se han cambiado sillones, se han nombrado cargos que en cualquier país de nuestro entorno estarían ya en el olvido político, se han tomado medidas que la justicia ha revocado, etc.

Sí, ya sé que no es fácil decidir el voto. Ningún partido, ninguno, de los que actualmente conforman el arco parlamentario merece el mismo. Ninguno apuesta por mirar al futuro y archivar de una vez por todas el pasado. Todos en mayor o menor grado siguen removiendo las cenizas, sin darse cuenta de que puede haber un ascua que encienda otra vez el fuego. Y esto es lo más triste, ¿de verdad merece hacerse con el poder a costa de lo que sea?

Tenemos, desgraciadamente, una clase política de muy bajo nivel, ínfimo. La falta de verdaderos líderes políticos la estamos pagando cara y la podemos pagar aún más cara.

Necesitamos un verdadero movimiento social, que desde posturas moderadas, con líderes de la sociedad civil que lo encabecen, planteemos una alternativa a esos partidos que solo miran por su propio bienestar y el de sus allegados. Hay que hacer de España una referencia de orden social, de democracia y de justicia. Una España del siglo XXI.