domingo, 11 de septiembre de 2011

La crisis y los tipos de interés

A fecha de hoy, el Ibex se deja un 26,99% respecto del cierre de Enero de 2000. En términos interanuales un 32,92%. Verdaderamente catastrófico. Casi doce años y un inversor de entonces se deja un tercio de su inversión en bolsa.

Momentos de pánico e incertidumbre, producidos en los últimos tiempos, son los causantes de este despropósito. Esta crisis que amenaza el sistema o modelo económico actual, tal y como lo conocemos, no tiene parecido con ninguna otra crisis pasada. Ni por los motivos que la han inducido, ni por el contexto actual de economía global, ni por los volúmenes, tanto absolutos como relativos que se mueven hoy en las bolsas mundiales.

El regreso y la perforación de los mínimos de Marzo-2009, podrían llevar al índice a los 5.300 puntos de sep-02, inicio del anterior ciclo alcista. Un escenario posible pero no probable. Nuestras empresas no son ni la sombra de lo que eran entonces. Muchas de ellas han duplicado y más que triplicado su tamaño, su presencia internacional es cada vez más notable y se han convertido en verdaderas multinacionales muy diversificadas en sus áreas de negocio.

Si tenemos en cuenta que la confianza, es el verdadero motor de esta economía que tenemos, cuesta pensar que los propios acreedores sean los que quieran tirar abajo el modelo. Nadie en su sano juicio, al que le deban dinero, trata de hundir a su deudor y provocar en él un incumplimiento de sus compromisos financieros. Entonces, ¿qué está pasando?

Para mi todo pasa por los tipos de interés. Llevan muchos años en niveles extremadamente bajos, que significan un interés real negativo. Es decir, que el que presta dinero no tiene beneficio por que la inflación le resta valor y la tasa de retorno no le compensa. Su estrategia entonces es la de tensionar el mercado y que esos tipos de interés aumenten de una u otra manera. Creando así una situación, que lejos de ser la solución es más bien un agravante de la misma.

En definitiva, bajo mi modesto punto de vista, si los tipos de interés de las deudas soberanas retornasen a niveles más consecuentes con los tipos de interés a los que se financian empresas y familias (6%-8%), se cuidase que la inflación no superase niveles del 1,5-2,5%, se mantuviesen estables los tipos hipotecarios, se incentivasen los sueldos de acuerdo a criterios de eficiencia y productividad y se estableciera un calendario de amortización de deuda pública que retornase está a parámetros lógicos y consecuentes, muy posiblemente saldríamos de la crisis reforzados al haber aprendido una lección importante: El crecimiento artificial no es sostenible.

Dicho esto, como de una u otra manera vivimos un ciclo económico más, con toda la cautela y prudencia que se debe en estos momentos, la inversión en valores de renta variable de nuestra bolsa de valores ofrece una interesante rentabilidad en el corto-medio plazo con un potencial de revalorización superior al 30 %.

¡Buena Suerte!

5 comentarios:

  1. Estimado Adan,

    Pienso que el problema no está en los tipos de interés, que en todo caso es una herramienta para limitar la circulación dineraria. Las deudas existentes simplemente son impagables, pues el superávit financiero que se produce en una situación normal una vez pagados los gastos e inversiones corrientes, apenas supera el 3 o 4% en el mejor de los casos, por lo que se necesitarían al menos 2 generaciones para pagar cuanto se debe actualmente. Hay mas deuda que dinero, este es el gran embuste universal a consecuencia del sistema piramidal fraccionado bancario, que permite ofrecer más créditos que cobertura real de depósitos, de ahí la insolvencia general financiera.

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  2. Estimado J.B., primero felicitarte por tu interesante blog que visite hace unos días. Respecto de tu comentario, en principio yo achacaba al intento de aumento del tipo interés, el detonante de la crisis. Después, a la vista de los acontecimientos y de la clase de gente que dominan los mercados, he llegado a esta otra conclusión. No sé si errónea, pero de momento es la que tengo.
    Saludos.

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  3. Esto es delicado caballeros, desde que se abandonó el patrón oro, lo que da valor al dinero, lo que lo avala, es ni mas ni menos que la deuda contraída para emitirlo. Con esto intento ponerle en reflexión Sr.JB. Las ingentes cantidades de dinero puestas en circulación durante lo que llevamos de crisis pone a prueba la capacidad del sistema,cierto, siendo exagerada la deuda y siendo exagerado el dinero en circulación. Evidentemente es una espiral sin fin, hasta que presumiblemente se agoten las garantías.
    El verdadero problema pienso es poner en orden a todo esto, y ahí es donde veo acertada la gestión de los tipos de interés; para los retornos de las inversiones. A nivel micro necesario y a nivel macro facilitando la movilidad de ese dinero creado con una bola de deuda que rueda en el tiempo.
    Buscar el termino medio es el verdadero reto del capitalismo actual.

    Siendo dos cuestiones básicas las que hay que equilibrar.

    a)- es claro que la deuda macro conceptualmente nunca puede ser pagada. Al emitir un Euro, hay que devolver un euro +1,25%, y nunca se ha creado ese 1,25% de mas.
    b)- en cambio,si con ese euro se hacen inversiones, donde se obtiene un rendimiento del 6%, se puede pagar al vencimiento el 1.25% y seguir realizando inversiones e incentivando la economía.

    a) y b) van de la mano, siendo a) renovable constantemente si b) es superior a a).

    una simple formula definiría matemáticamente una economía capitalista sostenible:
    a-(b-a)= a+x

    es fácil, el tipo de interés tiene la clave, siendo la x)

    Explicado de forma bastante bana, este es el resumen para dinamizar la economía.

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  4. perdón, cometí un error garrafal en la formula (no se en que estaría pensando). Es muy simple en realidad.

    x + a = b
    [a) precio oficial del dinero, x) tasa interés a empresas,familias,deuda soberana , b)rendimiento de las inversiones.]

    El problema es hacer que b) sea atractiva y superior a a)mediante x) y que esta sea lo suficiente para dinamizar la economía. Sin potenciar burbujas y sin estrangularla.

    Evidentemente esta formula se podría aplicar a las diferentes capas de macro y micro economía con diferente valor en X). Por ejemplo en función del riesgo.

    Al menos espero haber dejado claro el concepto (formulas a parte)


    reitero disculpas.

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  5. ODB, parece contradictorio pero después de lo visto, yo creo también que por ahí "van los tiros"
    Saludos

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