miércoles, 18 de septiembre de 2024

De Suárez a Sánchez...1976-2024 (2ª parte)

José L. Rodríguez Zapatero 

     A José Mª Aznar le sucedió José L. Rodríguez Zapatero (1960-), cuyo mandato empezó con la campaña de que se había derribado el gobierno con los atentados del 11-M. Bueno, a estas alturas ya sabemos bien como trabaja el Partido Popular.

    Durante su primera legislatura (2004-2008) todo iba “viento en popa” y él mismo presumía de que “estábamos en la Champions League de la Economía Mundial”. Nada más lejos de la realidad. Justo en octubre de 2008 estalló la crisis cuyo símbolo fue la quiebra del banco norteamericano Lehman Brothers con más de 150 años de historia. Hoy, ya en 2024, todavía quedan importantes y graves secuelas del pufo que supuso la burbuja financiera e inmobiliaria. Él, entonces, prestaba más atención a promover leyes como la Ley 52/2007 para quienes padecieron persecución o violencia durante la guerra civil y la dictadura, removiendo otra vez lo que parecía olvidado y perdonado, o proponer en la 59ª asamblea de la ONU de 2004 la “Alianza de civilizaciones” para acabar con el terrorismo internacional sin la fuerza militar, o su impactante frase: 'La tierra no pertenece a nadie, salvo al viento" en Copenhague (2009) ante el plenario de la Cumbre del Clima.

    Su segunda legislatura vino marcada por esta crisis a la que trató de hacer frente, primero con su plan E, tipo Keynes, para incentivar la economía. Y después recortando sueldos públicos, congelando pensiones, subiendo impuestos e incluso reformando la Constitución (art. 135) para priorizar la deuda publica sobre cualquier otro compromiso del Estado con la colaboración y apoyo del Partido Popular. Si no, nos cerraban el grifo en Europa. El caos, entonces.

    Durante su 2ª etapa la organización terrorista ETA en octubre de 2011 dejó de atentar, sumando 12 víctimas mortales más: El fin de una locura.

"Los créditos para satisfacer los intereses y el capital de la deuda pública de las Administraciones se entenderán siempre incluidos en el estado de gastos de sus presupuestos y su pago gozará de prioridad absoluta. Estos créditos no podrán ser objeto de enmienda o modificación, mientras se ajusten a las condiciones de la ley de emisión".

Mariano Rajoy
    Así llegamos a finales de 2011 cuando el Partido Popular obtuvo una mayoría absoluta, recayendo en Mariano Rajoy (1955- ) la responsabilidad de presidir el gobierno. Su cambio de discurso en cuanto a la crisis, le llevó de querer bajar impuestos cuando su antecesor los subía, a subirlos él aun más. Como símbolo de este cambio compulsivo es el gravamen impositivo que sufrieron los premios gordos de la lotería. Lo nunca visto. Más si tenemos en cuenta la amnistía fiscal que estableció en 2012.

    Sus dos legislaturas fueron bastante grises, alcanzando en la primera el récord de desempleo (2013) y descargando todo el peso sobre los trabajadores y pensionistas. Los primeros con un salario mínimo interprofesional paupérrimo, rebaja en la indemnización por despido improcedente y los segundos con una revalorización de las pensiones asegurada del 0,25%. Unos dos euros/mes para una pensión media.

    En la parte política podríamos destacar el auge del independentismo catalán que llevó a declarar la independencia en 2017, aunque dicha declaración duró nada. Puigdemont huyó escondido en un maletero y el resto de los cómplices encarcelados.

    Así y tras la sentencia del caso Gürtell le fue puesta una moción de censura que llevó a Pedro Sánchez al gobierno en junio de 2018. Le apoyaron ocho partidos (PSOE, Podemos, ERC, PdeCAT, PNV, Compromís, EH Bildu, Nueva Canarias) en total 180 votos. Posteriormente en 2019 y 2023, tras sendas elecciones, revalidó el mandato si bien en esta segunda ocasión le ha costado más, al quedar como segunda fuerza política tras el PP.

    Su mandato lo podemos resumir en; su pacto con Pablo Iglesias al que nombró vicepresidente segundo en enero de 2020 para después animarle a presentarse a las elecciones de la Comunidad de Madrid en 2021, la aparición de la pandemia, la guerra de Ucrania, la crisis energética y el período inflacionario derivado que aun vivimos.

Pedro Sánchez

    Ha sido y está siendo un período difícil, marcado por los acontecimientos antes señalados. La deuda pública en valores absolutos es muy elevada, en valores relativos respecto al PIB se ha reducido. El desempleo está en tasas del 11,3%, un número históricamente bueno. Actualmente estamos creciendo por encima de la media europea, aunque el gasto público, sobre todo político, es exagerado y debería de ajustarse.

    La fuerte subida del salario mínimo interprofesional (SMI) es quizás una de las mejores cosas que ha hecho, ello repercute en los salarios en general muy castigados con las crisis vividas desde 2008. Ha revisado las pensiones con el IPC, como se acordó en el Pacto de Toledo (1995) que puenteó su antecesor. Al mismo tiempo que han presentado un plan de sostenibilidad de estas de acuerdo con las directrices europeas. Nunca se había hecho desde entonces.

    La oposición está siendo brutal. Más que con Felipe González. La búsqueda de causas que le puedan llevar a la dimisión o el cese crece cada día; su esposa Begoña Gómez y su hermano David, están siendo sometidos a acusaciones e incluso investigaciones judiciales. Sobre la llamada trama Koldo cuyo presunto cabecilla es el ministro Ábalos, igual. Si bien en este caso el cese de este en 2021, ante sospechas que no pruebas, pudiera ser un argumento para su defensa, en el caso de que se pruebe la corrupción de Ábalos.

    Las vacaciones, el uso del Falcon, la carta de reflexión, el reconocimiento de Palestina o el asilo de Edmundo González, presidente electo de Venezuela, también son usados como arma política por la oposición. Todo lo que hace.

RESUMEN ECONÓMICO.

    1. PIB y Déficit (haz clik en el gráfico para ampliar)

    2.- Tasa de Paro y Deuda pública (haz clik en el gráfico para ampliar)

    Y hasta aquí, hemos llegado. ¿Qué pasará mañana?

lunes, 16 de septiembre de 2024

De Suárez a Sánchez...1976-2024 (1ª parte)

Adolfo Suárez

    En julio de 1976, a los pocos meses del fallecimiento del general Francisco Franco (1892-1975) el Rey Juan Carlos I cesó a Carlos Arias Navarro (1908-1989) y nombró a Adolfo Suárez (1932-2014), presidente del gobierno. La transición había empezado.

    Carlos Arias Navarro había sucedido al almirante Luis Carrero Blanco tras el atentado sufrido en Madrid que le costó la vida en 1973. Fueron los dos presidentes del gobierno que Franco tuvo cuando delegó la responsabilidad y quedó como jefe de Estado y generalísimo de los ejércitos.

    Fueron años difíciles. Pasar de un régimen autocrático a uno democrático era una labor compleja, un auténtico puzle. Había que hacerlo con las mismas instituciones heredadas del régimen anterior. Y a la tarea se dispuso Adolfo Suárez, qué le llevó casi cinco años, hasta su dimisión a principios de 1981.

    Una de las decisiones más polémica y trascendente que tomó fue la legalización del Partido Comunista de España (P.C.E.) en 1977, pues entendía que no podía haber unas verdaderas elecciones generales y democráticas sin el concurso del PCE. Algo que su líder, Santiago Carrillo (1915-2012), siempre valoró. Lo cual ayudó mucho a cerrar heridas de la guerra civil, olvidar y perdonar todo. Algo que se oficializó mediante la ley de Amnistía 46/1977, de 15 de octubre

Leopoldo Calvo-Sotelo

    
Su mandato (1976-1981) fue uno de los más sanguinarios de ETA, la organización terrorista vasca, sumó más de 300 asesinatos, casi ocho veces más de los cometidos con el régimen autoritario anterior desde 1968, año que cometió el primer atentado.

    Le sucedió Leopoldo Calvo-Sotelo (1926-2008), cuya primera sesión de investidura se vio interrumpida por el intento de golpe de estado que se produjo el 23 de febrero de 1981, al irrumpir el teniente coronel Antonio Tejero, pistola en mano, con un destacamento de guardias civiles. Golpe que se frenó en la noche de ese mismo día tras la comparecencia a través de televisión del Rey Juan Carlos I.

    Tras la posterior investidura de Leopoldo Calvo-Sotelo días después de la intentona golpista, gobernó durante poco más de año y medio. Las tensiones del partido político que representaba (UCD) acabaron con él y después con el partido.

Felipe González

    Fue en diciembre de 1982 cuando Felipe González (1942- ), líder del PSOE, fue nombrado presidente del gobierno tras ganar de forma abrumadora las elecciones generales. Su período de gobierno (1982-1996) es quizás uno de los mejores de nuestra historia reciente. Lejos de avivar rencores, el país se modernizó, progresó y dio mucha estabilidad a todo. Ingresamos en la Comunidad Europea y en la OTAN. Su largo mandato y algunos casos de corrupción, pero sobre todo la sombra del GAL y el uso de fondos reservados, junto a una feroz campaña de la derecha acabaron con su hegemonía, por poco. Podría haber gobernado como segunda fuerza electoral con pactos y no lo hizo.

    Durante su mandato los actos terroristas de ETA aumentaron, llegando a asesinar más de 400 personas.

    Le sucedió José María Aznar (1953-) durante dos legislaturas. La primera (1996-2000) con una mayoría exigua (156 diputados) requirió de pactos y negociaciones con los partidos nacionalistas. Fue una legislatura tranquila, consolidativa de la alternancia del régimen democrático y sin grandes avances ni retrocesos.

    La segunda legislatura ya fue distinta, la mayoría obtenida (183 diputados) destapó su carácter vanidoso y autoritario.

    Propició la burbuja inmobiliaria con su ley del suelo de 1998. Lo que nos llevó a un falso crecimiento económico que posteriormente estalló en 2008.

    Nos implicó innecesariamente en la guerra de Irak, que posteriormente se demostró que no existían armas de destrucción masiva y que solo sirvió para los intereses de EE.UU.

    Otra acción durante su mandato que subió mucho el volumen fue la llamada “invasión de Perejil” para echar a unos gendarmes marroquíes que se habían hecho con el islote. Algo desproporcionado que nos enfrentó a Marruecos y qué muy posiblemente todavía sientan la humillación.

José Mª Aznar 
    Antes de que finalizara este segundo mandato tuvo lugar el atentado del 11-M en diversos trenes de cercanías en Madrid que costaron la vida a casi 200 personas. Hasta la fecha no sabemos con certeza quienes fueron los autores y mucho menos sus ideólogos. "Los que idearon el 11-M no están ni en desiertos remotos ni en montañas lejanas" decía él entonces. Como dando a entender que todo obedecía a un complot político de no se sabe bien quién.

    Durante sus dos períodos de presidencia, ETA asesinó más de 40 personas. Un 6% de los crímenes cometidos anteriormente. El propio Aznar fue víctima de un atentado poco antes de las elecciones que le llevaron a la presidencia en 1996.

Continuará...


miércoles, 11 de septiembre de 2024

Edmundo González, acogido y reconocido

        Todo apunta a que hoy el Congreso español aprobará reconocer a Edmundo González como presidente electo de Venezuela, con los votos del PP, Vox, PNV, UPN y CCa, en total 177.

        Los países que ya expresaron su aval a Edmundo González Urrutia son; Estados Unidos, Perú, Uruguay, Ecuador, Costa Rica, Panamá y Argentina. Ningún país de la U.E. lo ha hecho aun, pero ello no quita para que España, al igual que ocurrió con el reconocimiento de Palestina, lo haga. Si, además, en este caso está refrendado por una mayoría del Congreso, miel sobre hojuelas.

        No hay ya ninguna duda racional de quién ganó las elecciones, ante la falta por parte del gobierno de Maduro de presentar las actas oficiales.

También el silencio de Zapatero es elocuente, así como la verborrea de Monedero escandalosa. Por citar dos políticos españoles muy comprometidos con el actual régimen de Venezuela.

        El asilo dado por el gobierno español es asimismo otro argumento a favor. La vida de él corría peligro y se ha conseguido esa mediación para que viniera a España, país elegido por él. Un gran paso, aunque el Partido Popular por boca de su presidente diga que “se le ha quitado un problema a Maduro” ¿Era mejor que se quedase allí?

        La actual fuerza política ganadora de las elecciones en Venezuela no queda descabezada en absoluto. Ya que es María Corina, vetada como candidata, el verdadero alma de esa oposición que ganó los comicios de forma aplastante (67%) y no el PSUV de Maduro y Cabello que se atribuyen una victoria con el 51% de los votos sin presentar ningún documento oficial que apoye ese resultado, alegando ´hackeo´ al CNE (Centro Nacional Electoral) y una conspiración de la ultraderecha mundial.

Rusia, China, Cuba, Irán, Siria y Nicaragua, entre otros países, reconocen y apoyan los resultados ofrecidos por el régimen chavista. Lo que viene a polarizar otra vez más el mundo. Dos bloques antagonistas, el llamado occidental, con su área de influencia, y el resto. Esto hace que un problema de índole local se convierta en un problema internacional, cuya resolución se hace más compleja por las consecuencias que puede conllevar.

Esta polarización es la que permite que en pleno siglo XXI haya países que no respeten los Derechos Humanos o que se vean sometidos a formas de gobierno dictatoriales, sin horizonte alguno de luz.

Por último, si el Congreso hoy reconoce a Edmundo González como presidente electo, el gobierno debe de dar el paso y alentar así a otros países de la Unión Europea a hacer lo mismo, lo que ayudaría mucho a buscar una solución política en Venezuela a corto o medio plazo. De lo contrario, al igual que ocurre en Cuba, puede eternizarse su vuelta a una normalidad democrática.

¡Viva Venezuela Libre!

lunes, 9 de septiembre de 2024

“No hay palabra mal dicha sino…”

        Las palabras pronunciadas recientemente por Pedro Sánchez en el Comité Federal del PSOE han levantado una polvareda inmensa en los medios y redes sociales:

Vamos a avanzar con determinación en esa agenda, con o sin apoyo de la oposición, con o sin un concurso de un poder legislativo que necesariamente tiene que ser más constructivo y menos restrictivo” decía el presidente del gobierno y secretario general del PSOE.

En primer lugar, creo que la advertencia estaba más dirigida a los partidos que le prestaron su apoyo en la investidura en noviembre pasado que a otros partidos de la oposición como el PP o Vox, cuya negación a toda iniciativa del gobierno es permanente.

En segundo lugar, un dictador o aprendiz de dictador lo es cuando tiene un parlamento a su medida. Como ocurre en otros países del mundo e incluso en la España de Franco que también tenía unas Cortes Generales con unos procuradores “ad hoc”, nunca elegidos con plena libertad.

Yo, las palabras pronunciadas las encajaría en un mensaje de advertencia a esos partidos; Sumar (31), Junts (7), ERC (7), Bildu (6), PNV (5), CCa (1) y BNG (1), que sumados a los 121 del PSOE dieron 179 votos a favor. Advertencia en el sentido de que la alternativa a su gobierno pasa por el PP más Vox. No hay otra.

        Y, en tercer lugar, por último, destacaría que dichas palabras fueron dichas en un contexto de reunión de partido, donde se busca la adhesión inquebrantable de sus militantes, demostrando fuerza y seguridad en si mismo.

        Dicho esto, es obvio que con un Congreso en contra sí se puede gobernar, pero no legislar. Leyes tan importantes como los Presupuestos Generales, serían inviables. Lo que más pronto que tarde nos llevaría a una convocatoria de elecciones anticipada. Las ultimas fueron en julio de 2023, hace poco más de un año.

        Desde 1979 hasta ahora, se han aprobado 4.979 Iniciativas Legislativas; Reformas Constitucionales (2), Leyes Orgánicas (387), Leyes Ordinarias (1.547), RR.DD. (766) y Acuerdos Internacionales (2.277), lo que da una media de más de 110 al año.

        Hoy las encuestas empiezan a dar una mayoría suficiente al PP y Vox, dos partidos conservadores, pero no miscibles como hemos podido comprobar recientemente. Pero claro, son encuestas, que solo sirven para animar o desanimar a los partidos. Luego la realidad puede ser otra.

       

        En España desde 1978, tras la abrumadora victoria del PSOE en 1982, todos los cambios de gobierno se han producido en un contexto de crisis.

En las mociones de censura de oct-2020 y mar-2023, presentadas por Vox, el PP votó no en la primera y se abstuvo en la segunda, demostrando así su tibieza e interés partidista, por encima de todo.

        En fin, seguimos con el espectáculo habitual (sonrío).