Y muchas
han sido las trolas que hemos visto, leído u oído estos cuatro años.
Difícil
es pronunciarse por cual ha sido la trola más grande (algunas se empezaron antes de 2011): si “el no más IVA (2010)” o “el
sueldo diferido y simulado (2013)” o “cuando yo gobierne bajará el paro (2011)” o “subir los
impuestos hoy, es darle una vuelta de tuerca más a las maltrechas economías de
las empresas y de las familias (2011)”
o “Siempre he sabido que todos los viajes de mi familia los pagábamos mi
exmarido o yo misma (2013)” o “ahora podemos subir el gasto público, ¿por
qué? Porque hay dinero (2015)” o la más reciente de “el atentado no ha sido contra
nosotros”.
La lista sería interminable.
Rajoy poniendo "palos en las ruedas" 2010 |
Pero quizás, la más grave, la más
comprometida fue: “Que se había equivocado al confiar en Bárcenas y
que cortó en cuanto se supo lo de las cuentas en Suiza (2013)”, trola que contó en el Senado
el 1 de agosto de ese año, en un pleno ante los diputados españoles. Debate que yo califiqué como “El debate de la comedia”.
Y es que
se habían publicado por el diario El Mundo, entonces dirigido por Pedro J. Ramirez,
posteriormente destituido y hoy feliz director de EL ESPAÑOL, unos SMS de apoyo y comprensión entre el presidente
y Luis Bárcenas, fechas después de descubrirse la fortuna de este último oculta
en Suiza. Algo que hubiera hecho temblar los cimientos de cualquier estado
occidental y moderno. Pero no, lo único que hubo fueron ovaciones de los 186
diputados que conformaban el grupo Popular y que solo faltó que hubieran entonado, “Otra, otra, otra…" (trola se entiende). En fin, para que seguir.
Gráfico de I.N.E. Encuesta de población activa |
Más
trolas se han realizado con artificios numéricos para resaltar una recuperación
que aún la gente corriente no hemos notado. Así podemos ver en el gráfico según
el Instituto Nacional de Estadística, que a finales de septiembre pasado había casi
500.000 personas menos trabajando que en septiembre de 2011, lo que viene a demostrar la nula o escasa recuperación habida. O con el déficit público
que no se ha cumplido en ningún ejercicio de la legislatura o con los
presupuestos generales apresuradamente aprobados para 2016, que según parece no son creíbles y
la U.E. nos hace rectificarlos. O con la deuda pública, que iba a ser la
prioridad cuando gobernase y la ha aumentado en más de trescientos mil millones
de euros (sí, >300.000.000.000 €), superando ya
el billón, con b, de euros.
¡Ah! Y que
decir del empleo creado: precario y mal pagado, ausente de un mínimo de calidad
y seguridad que permita mirar al futuro con ilusión.
En
definitiva una legislatura de trolas, iniciada culpando al anterior presidente
de “las muertes de J.F. Kennedy y de
Manolete” para hacerse con el poder y arrasar con recortes y reformas
equivocadas la ilusión y la esperanza depositada por la sociedad española. Nunca
más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario