miércoles, 15 de enero de 2014

El paseillo



Callejón de acceso a los juzgados de Palma.
En fechas recientes y tras un auto de imputación que consta de 227 páginas, el juez encargado del caso ha citado a la infanta Cristina en calidad de imputada por presuntos delitos fiscales y de blanqueo de capitales.
Algo que en la anterior ocasión, tras ser rechazada su imputación por la Audiencia de Palma, apuntaron los mismos magistrados responsables del fallo ya que no consideraban se hubiera producido tráfico de influencias y que se investigase en esa otra línea.
Así ha hecho el juez instructor en su extenso auto. Pero la tierra ha temblado. Hoy hemos conocido unas acusaciones del fiscal al juez por basar la imputación de la infanta en una conspiración.
En un principio, pudimos leer que sus abogados estaban valorando un nuevo recurso. Luego se desestimo y se provocó un adelanto de fechas. Rápidamente algún medio propagandístico tituló que la Infanta iba a declarar de forma voluntaria. Así se acaba “el martirio” que según el jefe de la Casa Real se estaba padeciendo. Solo faltó por decir que la infanta había concedido audiencia al juez.
Iñaki Urdangarín hace "el paseillo"
El ministro, declaró que había que evitar “el paseillo”, refiriéndose al tránsito por el callejón que da acceso al juzgado. Que ha pasado a ser lugar de fama, tras “el paseillo” de Iñaki Urdangarín, hace algún tiempo.
En fin, toda una serie de incongruencias. Un machacón constante de establecer diferencias en el trato con la justicia, lo que lleva a deslegitimar más aún a la institución monárquica, que durante bastantes años si supo servir de amalgama de unión de las diferentes sensibilidades que existen en España.
Todo un despropósito que a mi me hace pensar ya, que es más “la corte” que el propio monarca, los que tienen interés en establecer esas diferencias, sin llegar a comprender bien cual es el último objetivo de ese empecinamiento o si solo se basa en sus propios intereses de “cortesanos”.
Como ya escribí anteriormente, la historia se escribe una vez. Y me parece que la estamos escribiendo mal, pero que muy mal.

1 comentario:

  1. Ciertamente, despropósito parece ser la palabra clave.
    Por ejemplo el fiscal llamando la atención al juez. Increíble.
    Pero sobre todo a mi me parece que el quid de la cuestión está en quien lleva los asuntos de la realeza.
    A ver, una persona por haber nacido en alta cuna no necesariamente es mas inteligente ni mas de nada, pero se espera, se da por hecho que quienes les asesoran han de ser personas competentes. Todo lo que está saliendo a relucir parece tan chapuza a tenor de lo que vemos últimamente de cacos chorizos y demases que no puede uno dejar de preguntarse quien es el secretario de la realeza¿quien lleva los temas económicos?.
    Que un señor abogado cite el amor como causa eximente me da, no se que me da , de verdad. Primero la risa y después miedo porque es horroroso, patético.
    No se, hemos visto de todo en los medios sobre todo en Inglaterra cuando Diana, que esa es otra "trabajar jornada de 8 horas" que se dice de nuestra maniquí astur.
    Me gusta como forma de gobierno la que tenemos, una monarquía parlamentaria, mas que una república, ojo, tipo francesa o italiana. Porque claro con el vocabulario también se pierden a veces las definiciones de que es lo que es cada cosa.
    Pero es que lo menos que podemos esperar los "súbditos" de estas personas que son nuestra imagen al mundo, nuestros embajadores, es que estén bien asesorados para no cometer estas pifias.
    Si yo fuera el Juez lo primero que pediría es un listado de asesores de la casa real. :-P
    Y luego los pondría en cuarentena
    No sigo que me lanzo.

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